En la segunda temporada vimos a Paulina entrando a la cárcel, pero la tercera trae muchas sorpresas, una historia contado el antes y el ahora de la familia De la Mora
Por supuesto La casa de las flores no es solo comedia e imágenes y personajes agradables a la vista. La serie recupera magistralmente temas que ha abordado en temporadas pasadas como el de la crítica a la homofobia, con una trama que nos presenta una «terapia» para curar la homosexualidad. También somos testigo de los problemas que tiene Diego para que sus padres lo acepten tal como es. Se hace una crítica afilada de la iglesia, con el retorno de Simón, que en su nuevo papel como cardenal enseguida sugiere que Elena aborte al enterarse de que está embarazada y creyendo que él podría el padre. La De la Mora sigue en coma tras el accidente que tuvo a finales de la temporada anterior.
