La filtración de gameplay, detalles de la historia y vídeos cinematográficos de The Last of Us Part II fue realizada por hackers, no por un empleado de Naughty Dog enfadado, según aseguran varias fuentes al medio Kotaku y al periodista de Bloomberg Jason Schreier. Los hackers utilizaron una brecha de seguridad en los modos online de The Last of Us y Uncharted 3: La traición de Drake para acceder a los servidores de Naughty Dog.
«Tras hablar con dos personas con conocimiento directo sobre cómo se filtró The Last of Us 2, así como con algunos empleados de Naughty Dog, tengo buena idea de lo que ocurrió», dice Schreier en Twitter. Los hackers «encontraron una vulnerabilidad de seguridad en un parche de un antiguo juego de Naughty Dog y la usaron para conseguir acceso a los servidores de Naughty Dog».
El antiguo periodista de Kotaku añade que «el metraje que se filtró es de desarrolladores jugando una build antigua» del videojuego. También deja claro que las informaciones publicadas en foros y ciertos medios de comunicación sobre que la filtración procedía de un empleado enfadado con las prácticas laborales abusivas en el estudio son falsas: «De hecho, Naughty Dog ha extendido el pago y los beneficios de atención sanitaria a los trabajadores independientes por el COVID».