Lenín Moreno mandatario de Ecuador el pasado lunes indicó que se había terminado de inocular a quienes integran el sector salud, pese a que en diversas provincias decenas de médicos faltan vacunarse.
En el coliseo municipal de Guaranda Galo Miño Jarrín, el día de ayer 6 de abril, se inoculó a personal de primera línea, entre los que estuvieron médicos, odontólogos, enfermeras, auxiliares de enfermería y de los laboratorios.
David Pilco, médico ocupacional del Municipio de Guaranda, confirmó que en coordinación con el distrito de Salud, además de los médicos ayer también se inoculó al personal de primera línea de recolección de desechos sólidos y del cementerio.
Parte del personal de la red pública de Salud se vacunó entre el lunes y ayer, tanto de los hospitales públicos como de los establecimientos privados que se encuentran brindando la atención en el cantón Guaranda.
Es la primera dosis la que se aplicó, y se tendrá que esperar 21 días para la aplicación de la segunda, afirmo Pilco.
Guillermo Bastidas, expresidente del Colegio Médicos de Tungurahua, aseguró que en la provincia también falta una parte del personal de la salud que reciba la vacuna.
Mis alumnos de medicina que atienden en primera línea en los hospitales me indican que aún no han recibido las vacunas”, aseveró Bastidas.
Aunque con lentitud, la vacunación de los médicos públicos y privados en Azuay avanza según lo planificado en las fases cero y uno del Ministerio de Salud Pública (MSP).
En toda la provincia se estima que existen 5.000 médicos que ejercen en el sector público y privado. No todos están afiliados al Colegio de Médicos, por lo que no hay una cifra exacta.
José Pazmiño, presidente del gremio, afirmó que el principal inconveniente es el arribo a cuentagotas de las dosis, pero que, aun así, todo el personal de primera línea de los hospitales públicos ya recibió la inmunización.
Con esto coincidió Karla Calle, vicepresidenta de la Asociación Ecuatoriana de Médicos Posgradistas del Ecuador, y aclaró que hay otros compañeros del sector público que aún faltan porque fueron contagiados con COVID-19 en los últimos seis meses o porque se los vacunó contra la influenza.
“Ellos quedaron para después y se espera que sea en esta semana”, afirmó.
En cuanto a lo privado hay otra gran cantidad de profesionales independientes que aún no se vacunan y es justamente por la falta de dosis. Para ellos, el Colegio de Médicos del Azuay empezó una campaña para gestionarla ante el MSP priorizando a los de mayor edad.
En este proceso se incluye a todos los profesionales de esta rama, sin importar si son o no afiliados. “Aquí se quedan fuera los que no quieren, porque hay gente que quiere vacunarse con la Pfizer y no quieren la AstraZeneca, pero en general dentro del MSP y del IESS no se quedaría gente fuera, pero nos quedan fuera los de libre ejercicio profesional hasta conocer si existen dosis para ellos”, dijo.
Refirió que los médicos particulares también son de vacunación prioritaria porque atienden pacientes COVID-19 para apoyar al Ministerio. Según los datos que mostró, el 80% es atendido en casa y el 20% restante en los hospitales.
Francisco Martínez es un médico de 28 años que recibió la segunda dosis la mañana de este martes en la sede del Colegio de Médicos, lugar que sirvió como sede para la inoculación de los médicos, indicó que el proceso fue exitoso porque hubo orden, todos respetaron su turno y así se evitaron aglomeraciones.
Tras recibir la primera dosis no presentó efectos secundarios y ve de manera positiva que se haya cubierto a todo el personal de primera línea. En su caso, por ahora trabaja de manera particular, no pertenece al sector público.