Entre marzo de 2020 y el 22 de abril de 2021 suman 1′047.469 registros de colaboradores en esa modalidad laboral.
El trámite de esta suspensión fue realizado por 23.557 empresas que paralizaron la labor de sus trabajadores por uno, tres o seis meses, periodos que luego fueron renovados, de acuerdo con datos del Ministerio del Trabajo.
Este sábado se conmemora un año más del Día Internacional de los Trabajadores y esta modalidad al igual que otras aumentaron más del doble en comparación con el 1 de mayo de 2020. Como la reducción de la jornada, que en mayo pasado eran 144.496 colaboradores y hasta abril se registran 509.967.
Son alrededor de 10.558 empresas que se acogieron a esta modalidad y redujeron la jornada en un promedio de seis horas diarias, esto es, 30 horas a la semana.
Según el Código del Trabajo, la disminución no puede sobrepasar las 30 horas semanales.
En tanto, la modificación laboral también varió mucho. En mayo pasado eran 19.669 trabajadores y hasta el 22 de abril ascienden a 67.574.
El teletrabajo también es un registro que aumenta y más aún con el actual confinamiento. Hay 450.683 personas que laboran desde casa: 164.282 del sector privado y 286.401 del sector público.
Otro de los factores laborales es el contrato emergente que surgió con la publicación de la Ley de Apoyo Humanitaria, desde junio pasado.
Existen 87.381 contratos especiales hasta el 22 de abril, que pueden ser por un año y renovados por una sola vez por el mismo plazo. La jornada mínima es de 20 horas semanales y máxima de 40.
En trece meses de pandemia ya son 811.887 actas de finiquito que registra el Ministerio del Trabajo. 484.397 actas son por acuerdos entre las partes, 84.229 debido a la conclusión del periodo de labores, 71.333 por la terminación del tiempo de prueba y 64.154 a causa del despido intempestivo.
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