Quien fuera el reemplazo de Jorge Yunda, Santiago Guarderas, se encuentra desconcertado y el resulta incomprensible la convivencia en el Municipio de Quito con el alcalde Yunda y la lentitud e inmovilidad con que actúan las instituciones de la capital. Las declaraciones del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) o de la Judicatura sobre ilegalidades cometidas para el retorno de Jorge Yunda al cabildo no pasan de la formalidad frente a los micrófonos. Mientras tanto, la resolución que en un principio removía a Yunda como alcalde de Quito, actualmente parece estar desvaneciéndose.
Por otro lado Guarderas asegura que Quito tiene “dos alcaldes”. Sin embargo, asegura que no renunciará a sus intenciones por ser el único. «Hay una resolución del Concejo Metropolitano que aprobó la remoción de Yunda». Esa resolución fue elevada a consulta por el propio doctor Yunda ante el TCE, el máximo órgano jurisdiccional en materia electoral. Este resolvió que ese proceso de remoción observó las formas y el debido proceso. Por lo tanto, Quito tiene como alcalde a Santiago Guarderas.
En una entrevista a un reconocido diario Santiago Guarderas manifestó: «me encantaría que esto se solucione pronto, pero el doctor Yunda fue quien nos metió en esto, bajo la inercia o contemplación de las instituciones». En este momento, todos deberían estar convulsionados. Por otra parte del Consejo de la judicatura quien aprobó el regreso de Yunda no se ha manifestado al respecto. ¿Cómo puede haber procesos con esas irregularidades?; ¿Cómo puede la Asamblea estar a la expectativa, sin decir nada?; ¿Dónde está el TCE?, ¿De qué sirve que, teóricamente, diga que es el máximo órgano electoral si sus decisiones no se cumplen?, son algunas preguntas que sin lugar a dudas todos los ciudadanos se realizan y hasta la fecha no se pueden encontrar respuestas.