«El gobierno del encuentro» es el slogan publicitario que promociona al actual gobierno encabezado por el señor Guillermo Lasso, este termino ha sido cuestionado por muchos sectores sociales del país. Todo esto por diversas medidas que hasta la fecha han perjudicado a profesores, agricultores, transportistas, trabajadores y toda la sociedad civil que conforma a este hermoso pueblo ecuatoriano.
Si bien es cierto el presidente electo anuncio en su nombramiento que la primer gran obra que haría era la de vacunar de manera rápida y garantizada a todos los ecuatorianos, hasta la fecha el plan 9/100 ha sido ejecutado de manera oportuna y efectiva eso no se puede negar, es de atribuirle a Guillermo Lasso todo el esfuerzo que esta haciendo por gestionar la llegada de millones de vacunas semanales que sirvan para el beneficio y cuidado de toda la población.
Pero esto no satisface a nadie, el desempleo aumenta progresivamente y en vez de generar políticas publicas que sirvan de colchón para aguantar la crisis económica, lamentablemente el presidente Lasso esta haciendo todo lo contrario. Desde el recorte de salarios hasta la eliminación de los subsidios a la gasolina, han sido medidas abruptas que el autodenominado «gobierno de encuentro» ha ejecutado en tan solo 3 meses de gobierno.
Promesas de campaña, todo ha quedado en tan solo promesas de campaña que ilusionaron a un pueblo que salía del gobierno pasajero e invisible de Lenin Moreno. Facturas de electricidad, alimento semanal, cuentas de internet, colegiaturas, combustible para movilizarse, tan solo esto son un poco de los valores a los que la población debe enfrentarse mes a mes. Y en las calles hay ecuatorianos que nos preguntamos ¿ Como es posible que en plena crisis económica, el gobierno nacional ejecute ordenanzas que en vez de favorecer a la población, dificulta cada vez mas vivir el día a día de la vida?