La primera fase comienza el miércoles 1 de diciembre con el paso de tractocamiones que movilizan exportaciones e importaciones.
La apertura de la frontera entre Ecuador y Colombia será gradual, según un anuncio del presidente ecuatoriano Guillermo Lasso el lunes 29 de noviembre por la noche.
Se iniciará en el puente internacional Rumichaca desde este miércoles 1 de diciembre con el paso de tractocamiones que movilizan exportaciones e importaciones, este sistema ya se venía aplicando entre las 08:00 y 17:00, pero el acuerdo presidencial ahora permitirá el ingreso de los tripulantes hasta 11 km de la frontera común.
La nueva disposición termina con el incómodo intercambio de conductores en el centro del viaducto binacional de Rumichaca, que provocó quejas por varios siniestros de tránsito (choques o volcamientos) en territorio colombiano, afectando a los propietarios de los vehículos nacionales, dijo Patricio Rodríguez, presidente de la Asociación de Transporte Pesado de Carchi.
Los choferes ecuatorianos ingresarán a las bodegas de almacenamiento de mercaderías de Ipiales, después de 623 días de que el presidente de Colombia, Iván Duque, unilateralmente ordenó el cierre de fronteras en su país.
Están autorizados los profesionales del volante, quienes realizarán las labores de cargue y descargue y no podrán entrar a los centros poblados Ipiales o Tulcán. Un requisito obligatorio será el carné con todo el esquema de vacunas contra el COVID-19.
Yaco Martínez, gobernador de Carchi, minutos más tarde del informe gubernamental indicó que una segunda fase entrará en vigencia 30 días después (31 de diciembre de 2021), que contempla una apertura peatonal en los viaductos Rumichaca y San Miguel, no precisando los protocolos a cumplir.
Y una tercera fase consentirá la apertura del transporte particular a través del sistema pico y placa, es decir, considerando números pares e impares. Cada fase entrará en un proceso de evaluación por las autoridades de las dos naciones, preservando la salud y la economía de las poblaciones de frontera, adelantó Martínez.
Los temores que generó el anuncio realizado por los mandatarios Lasso y Duque en Quito, con el pronunciamiento de ayer, bajaron las tensiones e incertidumbre, especialmente en los sectores comercial y productivo de Tulcán, que advertían una caída en sus operaciones debido a las ventajas del diferencial cambiario entre el dólar que superó la barrera de los 4.000 pesos colombianos (USD 1 vale 4.035 pesos colombianos).
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