Las autoridades policiales detuvieron a ocho implicados por supuesto tráfico ilícito de personas que tenían planificado ir hacia Europa. Sus condiciones eran pésimas, estaban alojados en viviendas hacinadas, húmedas, mal ventiladas y sin los mínimos estándares de higiene.
Cerca de 612 refugiados e inmigrantes irregulares permanecían repartidos en 55 domicilios de Estambul hasta emprender el viaje hacia su destino.
En un comunicado del diario turco Hürriyet, los inmigrantes fueron entregados a la Administración Provincial de Inmigración para ser deportados inmediatamente luego de un control sanitario.
Muchos de los refugiados provenían de Afganistán, Siria, Pakistán y Bangladesh, Egipto, Argelia, Nigeria, Marruecos, Togo, India y Burkina Faso. Sin embargo, un poco menos de la mitad padecen diversas enfermedades, causadas aparentemente por las condiciones insalubres en las que se encontraban.
Foto: Europa Press