El láser más potente del mundo, el ‘Linac Coherent Light Source’ (LCLS), del Laboratorio del Acelerador Nacional SLAC del Departamento de Energía de los EEUU, tiene ahora un hermano al que se le han aplicado una serie de mejoras que lo han hecho todavía más rápido y más potente.
«En tan sólo unas horas, el LCLS-II producirá más pulsos de rayos X que los que ha generado el láser anterior en toda su vida», explica Mike Dunne, director del LCLS. «Los datos que antes podían tardar meses en recogerse podrán producirse en minutos. Llevará la ciencia de los rayos X a otro nivel, allanando el camino para toda una nueva gama de estudios y avanzando en nuestra capacidad de desarrollar tecnologías revolucionarias para abordar algunos de los retos más profundos a los que se enfrenta nuestra sociedad”.
Sus creadores aseguran que el LCLS-II permitirá a los científicos examinar materiales complejos con una resolución sin precedentes. Esto, según ellos, nos ayudará a: impulsar nuevas formas de computación y comunicaciones; revelar eventos químicos que nos ayuden a crear industrias más sostenibles y nuevas tecnologías de energía limpia; estudiar cómo las moléculas biológicas llevan a cabo sus funciones para desarrollar nuevos tipos de productos farmacéuticos; y profundizar en la mecánica cuántica midiendo directamente los movimientos de los átomos de manera individual.
El sistema ha alcanzado su temperatura óptima este mismo mes, ahora los investigadores están trabajando en desarrollar los primeros rayos X, algo que estiman podría pasar este mismo año.