Anita Montenegro y Antonio Carapaz , los padres de la «locomotora del Carchi» empezaron desde muy temprano a adornar la casa con globos y fotografías de su hijo. Allí se sintonizó la última etapa del Giro de Italia. Un parlante también transmitía los comentarios que venían directamente del país europeo.
“Vamos, Richard; vamos, mijín… sí se puede”, se escuchaba en la entrada principal de la casa de la familia Carapaz-Montenegro. Eran las voces de 30 ciclistas que coreaban consignas de apoyo. Ellos llegaron a las 07:00 y uno a uno saludaron a los padres del deportista nacional.
A esa misma hora, en el parque central de Tulcán más de 200 ciclistas se concentraron para participar de una rodada o ciclopaseo que se organizó en honor a Carapaz.
“Vamos campeón, vamos campeón” coreaban los asistentes levantando la bandera de la provincia y vestidos con los colores del equipo Ineos, al que pertenece Carapaz.
Por más de una hora recorrieron las principales calles de Tulcán hasta llegar al velódromo de la ciudad. Allí también se levantó una pantalla gigante para que toda la ciudadanía pudiese observar el turno de la contrarreloj de Carapaz, quien arrancó a las 09:45.
Carapaz logró un histórico segundo lugar en el Giro de Italia.