Un colectivo de más de 300 organizaciones de la sociedad civil se unen en la Comisión Convocante para lograr un diálogo entre el Gobierno y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), quien convocó al paro hace nueve días.
La presidencia ha respondido a la invitación favorablemente; mientras que la Conaie no ha confirmado su participación. Los representantes de esas organizaciones resaltaron que cuentan con la capacidad de entablar ese diálogo y que incluso intervendría la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Ecuador, y de la Unión Europea (UE).
El respaldo de la ONU y UE dice que es importante el respaldo de organizaciones internacionales para dar respuesta a esta situación compleja que atraviesa el país.
Esta mañana, Tamara Taraciuk, de Human Rights Watch, exhortó al presidente Lasso que no se emplee el uso excesivo de la fuerza. «Ecuador no pude repetir lo ocurrido en 2019».
Para ese diálogo, las organizaciones plantean tres lineamientos: generar un espacio de canales para la solución de los conflictos; establecer un marco conceptual de trabajo que permita llegar a acuerdos a largo plazo y que involucre a otros sectores de la sociedad.
La metodología incluiría fases de conversaciones bilaterales con las dos partes para que queden claras las «reglas del juego». Otra fase sería el acuerdo de los temas para garantizar los resultados y que ambas partes estén de acuerdo.
Después de esto se creerían mesas de trabajo que se adapten a la estructura de la Conaie, para que en cualquier punto puedan consultar con las bases.
En cuanto a los tiempos, Ana Muñoz, de la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones de Sociedad Civil dijo que debe empezar lo antes posible y que tomara el tiempo que sea necesario.
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