La Policía Nacional frustró un robo a mano armada y abatió a un presunto delincuente en la vía Perimetral de Guayaquil.
El suceso tuvo lugar la noche del 24 de mayo, mientras los agentes patrullaban esa carretera. Al detenerse en un semáforo en rojo, observaron a un hombre armado acercándose a una furgoneta escolar. El individuo apuntó con el arma al conductor, amenazando su vida.
Los policías descendieron del vehículo para intervenir en el intento de asalto. En un comunicado, la entidad informó que los agentes se identificaron y ordenaron al hombre que depusiera su arma. Sin embargo, el sospechoso incrementó su nivel de violencia y apuntó con su pistola a los policías. «Ante la amenaza inminente, los agentes se vieron obligados a hacer ‘Uso Legítimo de la Fuerza’ para neutralizar la amenaza», detalló el informe.
Durante el enfrentamiento, el sospechoso recibió un disparo en el muslo derecho. Fue trasladado a un centro de salud, donde falleció debido a la gravedad de la herida.
La Policía informó que junto al sospechoso se encontró una pistola negra con su respectivo cargador, que fue llevada al Centro de Acopio de la Policía Judicial siguiendo la cadena de custodia. El presunto delincuente fue identificado como Bryan V., y por el momento, se desconoce si tenía antecedentes penales.
En Guayas y otras cinco provincias rige un estado de excepción, que no incluye toque de queda, pero sí la movilización de las Fuerzas Armadas en apoyo a la Policía para combatir la delincuencia organizada y la suspensión del derecho a la inviolabilidad del domicilio, permitiendo ingresar y registrar inmuebles sin orden judicial.
A principios de año, Noboa elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de «conflicto armado interno», catalogando a las bandas criminales como grupos terroristas y actores beligerantes no estatales.
Se atribuye a las bandas del crimen organizado, principalmente dedicadas al narcotráfico, la ola de violencia que afecta a Ecuador, colocándolo entre los países de Latinoamérica con más homicidios, con una tasa de 47 por cada 100,000 habitantes en 2023, según el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado.