Los ataques aéreos de Israel en Líbano asesinaron al menos 6 personas y 15 resultaron heridas este 13 de noviembre, informó el Ministerio de Salud local.
En esta ocasión, la zona afectada fue la ciudad de Aramoun, a las afueras de Beirut, la capital libanesa, donde las bombas impactaron contra un edificio residencial. Según reportó la prensa estatal, no se emitió advertencia alguna antes de la embestida, que también dejó niños desaparecidos.
Este asalto se suma al perpetrado también por el Ejército israelí en los suburbios del sur de Beirut, en Dahiyeh, tras emitir advertencias de evacuación. Según aseguró el informe castrense, estos ataques tenían como objetivo “instalaciones e intereses de Hezbolá”.
Se trata del segundo día consecutivo de ataques del Estado de mayoría judía en los suburbios del sur de Beirut, tras haber bombardeado la zona el martes.
También este miércoles, un ataque reivindicado por Hezbolá mató a dos personas en la ciudad de Nahariya, en el norte de Israel. El asalto perpetrado con drones iba dirigido, según aseguró el movimiento chiita, a una base militar al este de esa localidad.
Mientras las embestidas se siguen produciendo, Líbano ansía una forma de alcanzar un cese el fuego. Así lo afirmó en las últimas horas el presidente del Parlamento, Nabih Berri, después de que el alto funcionario estadounidense, Amos Hochstein, afirmara que veía “posibilidades” de alcanzar pronto una tregua en el conflicto entre Israel y Hezbolá.
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