La mañana de este miércoles 19 de mayo de 2021, el presidente electo, Guillermo Lasso y el vicepresidente electo, Alfredo Borrero recibieron las credenciales del Consejo Nacional Electoral (CNE), en el Centro Cultural Metropolitano de Quito.
Tras recibir la placa con las credenciales, Lasso, se dirigió a los presentes. “Es con profunda emoción que hoy he venido hasta aquí acompañado de mi esposa, mis hijos, y mi familia, para recibir la credencial que certifica los resultados de las elecciones del 11 de abril. Cada uno de ellos ha hecho este recorrido conmigo, sosteniéndome a cada paso con su amor. Y si fuera posible, en un mundo ideal estuvieran dando este paso final también conmigo, recibiendo esta credencial junto a mí en este mismo estrado. Ustedes lo merecen tanto como yo”, fueron las primeras palabras del presidente electo.
El presidente defendió la legitimidad del proceso electoral y dijo que el Gobierno se hará eco de esa legitimidad buscando el “encuentro” de todos los ecuatorianos, dijo que acepta la credencial con profunda humildad y hará todo lo humanamente posible para estar a la altura de “tan soberano encargo”.
Hizo referencia a los años del correato y dijo que se sufrió persecución y continuos vejámenes semanales, comparó el país con la situación que atraviesa Venezuela, expresó que hicieron reformas para reelegirse indefinidamente y hubo quienes hablaron en quedarse por décadas, pero el 11 de abril, “Ecuador cambió”, por el “Ecuador del encuentro”.
Al referirse al Ecuador que sueña, Lasso sostuvo que busca “un Ecuador donde no hacen falta caudillos para imponer su única voluntad a gritos, un Ecuador donde el presidente sea, ante todo, el instrumento de esa voluntad de encuentro ciudadanos. Añadió que: “aprendimos que sólo hay una respuesta posible ante el autoritarismo: democracia, democracia y más democracia”.
Lasso hizo referencia a la elección de autoridades legislativas en la Asamblea, la semana pasada. “Ceder ante la tentación de esa supuesta gobernabilidad (…) generaría más desconfianza en los políticos y, por extensión, en todo el sistema. Y ahí sí se destruiría la gobernabilidad que tanto prometen, el regalo que tanto tratan de ofrecernos. Mi responsabilidad como futuro jefe de estado es preservar, ante todo, la honorabilidad y confianza que los ciudadanos tienen en sus instituciones y en la cosa pública. Y es esa, señores, la base de toda gobernabilidad.
Al hablar sobre la independencia de poderes en el sistema democrático, Lasso dijo que ninguna “comisión de la verdad” puede estar sobre la ley.
El evento empezó pasadas las 11:00, con el ingreso de la presidenta del CNE, Diana Atamaint, luego el vicepresidente electo, Alfredo Borrero con su esposa, Lucía Pazmiño y, finalmente, el presidente electo, Guillermo Lasso con su esposa María de Lourdes Alcívar.
Las autoridades electas ocuparon la mesa principal junto a los consejeros electorales. Al acto, que inició con el Himno Nacional, asistieron autoridades militares, policiales y civiles, titulares de otras instituciones del Estado.
La primera intervención fue de Enrique Pita, vicepresidente del CNE, quien manifestó que atrás queda el trabajo de cerca de 40.000 funcionarios en las elecciones y las descalificaciones al proceso.
Luego, Atamaint señaló que la elecciones fueron libres y transparentes, insistió en la “tarea cumplida” de la institución que preside, calificó como un “acierto” que el proceso de vacunación se realice a través de la base de datos del padrón electoral y en los mismos recintos electorales de los últimos comicios.
“Como ecuatorianos depositamos nuestros anhelos y esperanzas para que las iniciativas individuales puedan coincidir con las colectivas (…) muchos éxitos en su gobierno, queridos presidente y vicepresidente electos de la República del Ecuador, Dios les bendiga”, fueron las últimas palabras de Atamaint.