Una de las fechas más esperadas por los ecuatorianos en todo el año es cuando llega el momento de probar la deliciosa colada morada. A lo largo del tiempo, esta tradicional bebida se ha convertido en algo simbólico y cultural, tanto así que en algunas familias tiene un valor muy especial. La colada morada se sirve acompañada de unas guaguas de pan en el Día de los Difuntos para celebrar y recordar a quienes ya no están con nosotros.
La colada morada tiene sus orígenes hace mucho tiempo atrás cuando el territorio era habitado por las culturas indígenas precolombinas. La intención de las culturas era preparar a los difuntos para un rito espiritual y religioso en donde la colada representaba su sangre y las guaguas de pan su cuerpo. Actualmente, no estamos muy alejados del pasado, pues en muchos cementerios aún hay quienes tienen la creencia de dejar colada y guaguas de pan a sus seres queridos que vienen a visitarlos.
Todos los años en Ecuador los pequeños y grandes comerciantes se esfuerzan por mantener viva esta bonita tradición, es por eso, que se organizan distintos eventos y ferias gastronómicas para compartir de pequeñas, pero deliciosas degustaciones de colada morada. Otros negocios que se encargan de su venta lo ven como una oportunidad para salir adelante, debido a la gran demanda en estas fechas.
Dependiendo de cada cultura, la colada morada tiene una preparación diferente, sin embargo, la mayoría de las veces es inevitable no pensar en que sea cual sea la receta el resultado jamás decepcionará. No hay duda de que, a través de los años la colada morada seguirá siendo un símbolo de cultura e identidad para los ecuatorianos y sobre todo una tradición que conecta con nuestra historia.