El presidente ecuatoriano Daniel Noboa está bajo escrutinio por realizar campaña sin tomar la licencia legalmente requerida durante la segunda vuelta electoral contra Luisa González. La ley ecuatoriana exige que quienes buscan la reelección renuncien temporalmente al cargo para garantizar una competencia justa. Esta situación se complica aún más por las tensiones con la vicepresidenta Verónica Abad, quien asumiría las funciones presidenciales durante la ausencia de Noboa.
La tensa relación entre Noboa y Abad se ha visto marcada por disputas legales y políticas. En noviembre de 2024, Abad fue suspendida de su cargo por 150 días sin goce de sueldo debido a acusaciones de «abandono injustificado» de sus funciones. Esta suspensión fue posteriormente revocada por un juez que la declaró inconstitucional y restituyó a Abad en su cargo.
A pesar de su restitución, Noboa ha intentado marginar a Abad nombrando a otros funcionarios como presidente interino durante sus ausencias de campaña, una medida que ha sido ampliamente criticada por carecer de justificación constitucional. Abad ha acusado a Noboa de abuso de poder y de llevar a cabo un golpe de estado de facto, lo que pone de relieve la creciente división entre ambos líderes.
Expertos legales y líderes de la oposición han expresado su preocupación por las implicaciones de las acciones de Noboa para las instituciones democráticas de Ecuador. Argumentan que eludir el proceso constitucional socava el Estado de derecho y sienta un precedente peligroso para futuros gobiernos. El Consejo Nacional Electoral (CNE), y el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) están bajo presión para abordar estas violaciones y así mantener la integridad del proceso electoral.
A medida que se acerca la segunda vuelta electoral, el clima político en Ecuador se mantiene tenso. Las actuales disputas entre el presidente y el vicepresidente, sumadas a la decisión de Noboa de hacer campaña sin pedir licencia, han aumentado las incertidumbres sobre la gobernabilidad del país y la legitimidad del proceso electoral.