En los Condominios San Gabriel y en los alrededores de la avenida Rumichaca Ñan, en Quitumbe (sur de Quito), hay un ambiente de consternación. Ayer, 18 de julio del 2019, los vecinos del barrio no querían comentar qué ocurrió la noche del miércoles 17 de julio cuando un conductor de taxi murió apuñalado, tras ser víctima de un violento asalto.
El fatal suceso se produjo a las 21:15 del 17 de julio cuando Jorge Enrique Bedoya Andrade, de 73 años, se movilizaba en su taxi, perteneciente a la Cooperativa Remis Driver SA. Aún se desconoce cómo sucedió el crimen que se registró cerca de su domicilio. En las imágenes difundidas por ciudadanos se observa el cuerpo sin vida del conductor cubierto con una manta y junto a él se halla el vehículo con el que se ganaba la vida.
La esposa de Jorge Bedoya comentó que cuando llegó al lugar había mucha sangre en el taxi y su cónyuge tenía cortes en las manos y en el cuello. Todavía no cree haber perdido al hombre con el que compartió 30 años.
La Policía Nacional señaló que un guardia de seguridad que trabaja en esa cuadra trató de impedir el asalto y resultó herido. Esa noche fue trasladado a un hospital y permanece con pronóstico reservado.
Testigos del sector Las Cuadras 3, en Quitumbe, contaron que al parecer el pasajero que se movilizaba en el taxi es el responsable de asalto. Tras cometer el crimen, el sospechoso huyó por una quebrada. El lugar es de difícil acceso y permanece desolado. Un arma blanca fue encontrada por la Policía al interior del vehículo, con la que el hombre habría apuñalado a la víctima.
Para ingresar a los Condominios San Gabriel, ubicados en la avenida Rumichaca Ñan, se debe circular por una calle que no tiene salida. Allí se produjo el crimen.
El fallecido trabajaba en una unidad de la cooperativa de taxis cuya sede funciona en el norte de la capital, en Carapungo. Este Diario se contactó con las oficinas de la compañía en reiteradas ocasiones pero no hubo respuesta.
Una moradora del sector, que prefirió no identificarse, contó que está muy asustada pues no había pasado por algo parecido antes.
El mayor Max Molina, jefe de operaciones subrogante del Distrito de Policía Quitumbe, manifestó que la Policía tuvo una respuesta inmediata y que el caso se encuentra bajo investigación. La Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) está realizando las diligencias pertinentes para encontrar al culpable del crimen.
Según la Policía, la ambulancia que acudió al lugar para atender al herido se habría demorado alrededor de 30 minutos en llegar. La víctima ya había fallecido cuando los paramédicos atendieron la emergencia.
El oficial hizo un llamado a la ciudadanía a no enfrentar a los delincuentes y entregar las pertenencias que tengan, de ser el caso, para precautelar la vida.
Los moradores del lugar prefirieron no dar declaraciones por temor a represalias pues aseguran temer por su seguridad ya que el sector se ha vuelto muy peligroso.
Fuente: El Comercio