Este domingo, durante más de una hora, las pantallas de monitoreo del Instituto Geofísico (IG) registraron por más de una hora una señal fuerte desde el costado occidental del volcán Cotopaxi. Los expertos determinaron que se trató del descenso de flujos de lodo, una mezcla de gases, ceniza caliente y hielo de la montaña, un fenómeno conocido como lahares secundarios.
Mario Ruiz, director del IG, especificó que la alta frecuencia registrada salió de la estación sísmica BREF, pero que son episodios pequeños. Además, expresó que no son de magnitud considerable como para generar una alarma.
Durante la tarde también se registraron lluvias leves, emisión de gases y vapor, alcanzando una columna de 500 metros sobre la cumbre, en dirección Este del volcán, cuya altura es de 5.897 metros sobre el nivel del mar
Hasta ahora existe confirmación de que ninguna población cercana ha recibido la ceniza que sale del volcán desde la noche del viernes 21 de octubre; además, la actividad se mantiene en la categoría baja. No obstante, las autoridades han decidido declarar la alerta amarilla, ya que permite incrementar el nivel de vigilancia y respuesta ante cualquier erupción o emisión alta de ceniza.
El Instituto señaló que debido a la dificultad de acceso a la zona, en las primeras horas de la mañana del lunes acudirá un equipo de técnicos para recabar evidencias de los flujos descendidos.