Al menos cuatro personas han muerto cruzando el Canal de la Mancha en una patera de migrantes que entró en dificultades en aguas británicas en la madrugada del miércoles. A su vez, los servicios de rescate y emergencia rescataron con vida a 43 individuos que viajaban en la precaria embarcación de goma negra, según datos iniciales recogidos por los medios británicos.
El trágico incidente ha tenido lugar al año del naufragio de 31 personas, la mayoría de nacionalidad kurda-iraquí, cuando intentaban navegar por el llamado corredor de la muerte entre la Unión Europea y el Reino Unido. La patera, que era similar a la utilizada en el accidente de hoy, hizo aguas cerca de la costa francesa el 24 de noviembre de 2011.
La alarma saltó esta vez unas 14 horas después de la presentación de la última estrategia con la que el Gobierno conservador británico aspira a bloquear el asentamiento permanente de refugiados y migrantes económicos que entren en el país por “rutas ilegales”. Así, el primer ministro, Rishi Sunak, anunció su intención de endurecer la legislación a fin de asegurar la pronta expulsión de irregulares y permitir que sus casos se tramiten en terceros países, como Ruanda.
Hasta la fecha, ninguna medida oficial ha causado el efecto disuasorio que el Ejecutivo conservador quiere conseguir en su objetivo para acabar con las embarcaciones pequeñas cursando el Canal de La Mancha y destruir el negocio de las mafias de transportistas humanos.
Fuente: El Mundo
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