El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, declaró que las ideologías de género, que considera «contrarias a la naturaleza», quedan excluidas de las escuelas públicas de su país. Enfatizó la importancia de la participación de los padres en la toma de decisiones sobre los contenidos educativos, abogando por una enseñanza que aborde temas «útiles» y «tradicionales» como moral, civismo y nuevas materias como finanzas, pero sin incluir la ideología de género.
Mauricio Pineda, ministro de Educación, ratificó esta posición: «Hemos eliminado por completo cualquier indicio de la ideología de género de las escuelas públicas».

En una intervención previa, Bukele denunció la introducción de conceptos «contrarios a la naturaleza» en la educación de los niños y abogó por «erradicar» esas ideas de las instituciones educativas, proponiendo reintegrar «a Dios en las escuelas».
A pesar del respaldo del presidente salvadoreño, la iniciativa recibió críticas por parte de una parte de la población. Morena Herrera, presidenta de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto, argumentó que la eliminación del término «género» de la currícula educativa no resuelve las desigualdades existentes.
«Aunque lo eliminen de la currícula, los documentos oficiales no están erradicando las desigualdades presentes en la sociedad», expresó Herrera, defensora de los Derechos Humanos. Además, destacó que persisten las brechas de desigualdad entre mujeres y hombres en diversos ámbitos de la vida social y económica, así como en la violencia, sin abordar los problemas educativos específicos.