Segundo intento fallido de IAG en su plan de adquisición de Air Europa. El grupo de aerolíneas que agrupa a Iberia, Vueling, British Airways y Aer Lingus ha anunciado esta tarde que renuncia a hacerse con el eterno rival en España. Ha pesado en contra la exigencia de fuertes concesiones a la competencia, en forma de rutas y slots (permisos de despegue y aterrizaje), que parte de la Comisión Europea.
La compañía que dirige Luis Gallego ha adelantado a esta tarde la presentación de resultados del primer semestre, cita con el mercado que estaba prevista para mañana. La jugada da tiempo para que los inversores puedan digerir la mala noticia relacionada con Air Europa antes de la apertura de la jornada bursátil de este viernes. Con la terminación del acuerdo con Globalia, matriz de Air Europa, se activa una penalización de 50 millones de euros a favor del grupo controlado por la familia Hidalgo.
El consejero delegado de IAG, Luis Gallego, ha asegurado ante los medios que no prevé reactivar esta operación, “al menos en el medio plazo”. El abandono del proyecto de integración de Iberia y Air Europa ha sido comunicado a la Dirección general de Competencia. La portavoz comunitaria de Asuntos Económicos, Veerle Nuyt, señala que la CE “toma nota” de la rescisión del acuerdo entre IAG y Globalia: “La Comisión está evaluando actualmente si se cumplen todas las condiciones pertinentes para abandonar la fusión según el Reglamento de concentraciones de la UE”.
El órgano de Competencia de la UE advirtió hace un par de semanas que las cesiones (remedies) otorgadas a aerolíneas rivales no eran suficientes para evitar un perjuicio al consumidor con la entrada de Air Europa en IAG. Pero la compradora no estaba dispuesta a llegar más lejos tras proponer el reparto entre sus rivales del 52% de la producción de Air Europa en 2023. Fue en una propuesta mejorada de remedies, presentada el 10 de junio, como señal de que se apostaba con fuerza por la integración.
Gallego ha afirmado que “la operación perdía su sentido” y que la renuncia es “la mejor decisión para proteger los intereses de nuestros accionistas”. El ejecutivo de IAG asegura que la empresa sigue comprometida con la inversión en España y el refuerzo de Iberia en su hub de Madrid. Este año la mayor aerolínea española de red tiene previsto un crecimiento del 14% en su capacidad.
La última oferta de remedies de IAG respondió a un informe de objeciones trasladado por Competencia el 26 de abril, en el que ya se expresó la oposición comunitaria a una integración que controlaría el 64% del tráfico entre España y América (45% de Iberia y 19% de Air Europa) antes de las referidas cesiones.
La primera ofensiva de Iberia sobre la aerolínea de Globalia, que arrancó en octubre de 2019 y fue congelada en 2021, ya chocó contra las reticencias comunitarias.
Competencia tenía hasta el 20 de agosto para hacer público su veredicto sobre la operación, pero IAG ha preferido ahorrarse la negativa por respuesta. El equipo que examina la documentación de la operación trasladó el lunes 22 a IAG y a directivos de Air Europa que los viajeros verían recortado su acceso a una oferta en competencia, como la que tienen ahora en Madrid-Barajas. Lo que en el sector se conoce como un hub fragmentado, con la pugna de dos aerolíneas de red, solo se da en España. Otros grandes aeropuertos europeos cuentan con una compañía dominante: Lufthansa en Fráncfort, KLM en Ámsterdam, Air France en París-Charles de Gaulle, British Airwaysen Londres-Heathrow, TAP en Lisboa o ITA en Roma. La petición de un trato igualitario ha sido la baza jugada por IAG, parece que con escaso éxito.
Para evitar una posición de dominio, IAG ofreció una alianza entre la colombiana Avianca y la española Volotea. Ambas aerolíneas forman parte del grupo de seis compañías elegidas por IAG (remedy takers) para cederles operaciones de Air Europa. La joint business anunciada el 25 de junio por la sudamericana y la low cost que preside Carlos Muñoz iba a simular el funcionamiento de una aerolínea de red, con conexiones entre la programación de largo radio de Avianca y los vuelos punto a punto que realizaría Volotea. Pero el plan no ha convencido en Brueselas.
IAG también presentó acuerdos con Ryanair y Binter para cederles rutas de corta y media distancia, especialmente entre la Península y las islas, y con las firmas World2Fly e Iberojet para entregarles operaciones de larga distancia. La Comisión constató que la suma de Iberia y Air Europa resultaba un excesivo dominio tanto en el mercado doméstico español como en rutas hacia Buenos Aires, Montevideo, Lima, Panamá, Caracas, Ciudad de Panamá, Quito, Santo Domingo, Miami y Nueva York.
La aprobación este mismo mes de la absorción de la aerolínea ITA, antigua Alitalia, por Lufthansa había hecho albergar ciertas esperanzas a las compañías españolas, en un contexto en que el sector está en proceso de consolidación en todo el mundo. Para sacar adelante aquella operación hubo presiones políticas del Gobierno italiano.
El 100% del capital de Air Europa había sido valorado en 500 millones, a lo que suman más de 500 millones de deuda contraída durante la pandemia y que ha de ser devuelta a finales de 2026. IAG e Iberia han defendido en los últimos años que la suma de las dos mayores aerolíneas españolas de red evitaría los actuales solapamientos en sus operaciones, principalmente en rutas hacia América, y permitiría mirar a nuevos destinos en Oriente Medio y Asia. La suma de Iberia y Air Europa suponía coordinar los 42 aviones de largo radio de la primera con los 28 que tiene la segunda, además de sus flotas de corto radio.
Fuente: El País