Nelson Serrano, fue un empresario ecuatoriano que se trasladó a Estados Unidos, quedó envuelto en uno de los casos judiciales más polémicos. En 1997, fue acusado del asesinato de cuatro personas en Bartow, Florida.
Tras una serie de investigaciones y juicios, fue condenado a muerte en 2007.
Serrano siempre mantuvo su inocencia, y su defensa presentó nuevas pruebas que indicaban irregularidades en el manejo del caso, incluyendo una tercera arma en la escena del crimen y testimonios que sugerían la presencia de otras personas.
La defensa de Serrano alegó que su extradición desde Ecuador en 2002 fue ilegal y que su juicio en EE.UU. estuvo lleno de violaciones a sus derechos humanos. En 2023, la Corte Constitucional de Ecuador aceptó una acción de incumplimiento contra varias instituciones estatales, ordenando asistencia legal continua tanto en Ecuador como en EE.UU.
La familia de Serrano pidió al Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador que llevara el caso a la Corte Internacional de Justicia en La Haya, citando violaciones de tratados internacionales y la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.
Serrano, condenado a muerte en 2007, pasó su tiempo en el corredor de la muerte en la Institución Correccional de Union en Raiford, Florida, bajo condiciones extremadamente duras, como confinamiento solitario y severas restricciones de contacto.
En julio de 2024, su hijo Francisco mencionó que Nelson tenía un tumor cerebral que lo había dejado postrado y al borde de la inconsciencia.
Nelson Serrano falleció el 7 de agosto en un hospital de Florida. La noticia fue confirmada por su abogado, Óscar Vela, el 8 de agosto de 2024, quien declaró que Serrano había muerto de un infarto y que ahora les queda luchar por su inocencia.