Este jueves 7 de noviembre, a través de las redes sociales estaba circulando supuesta información que había sido encontrada en el celular del excandidato presidencial, Fernando Villavicencio. Una cantidad de al menos 5.000 chats habían sido filtrados y subidos a internet. Este contenido fue difundido la abogada Angélica Porras, quien aspira un puesto en la Corte Constitucional y también Priscila Schettini, candidata a la Asamblea por el correísmo.
Como si fuera poco, estos mensajes fueron puestos a disposición en un documento de google drive. En los mensajes se vinculaba a Fernando Villavincencio con la Fiscal General, Diana Salazar y la exminsitra de Gobierno, María Paula Romo. Dos días antes de que las redes estallaran con esta información, la Fiscalía General del Estado desmintió contundentemente la veracidad de estos chats.
A través de un comunicado aseguraron que el celular está actualmente en poder del FBI, misma institución que se había encargado exclusivamente del peritaje del dispositivo móvil en diciembre de 2023. La Fiscalía por su parte, solo recibió una copia del mismo y el caso cerró con 5 personas sentenciadas.
Las reacciones de los familiares no tardaron, y por supuesto Verónica Sarauz, viuda de Villavicencio expresó su enfado contra la Fiscalía en redes sociales y afirmó lo siguiente: «Ustedes, que fueron negligentes en una investigación donde claramente hay un fraude procesal, se atreven a decir que no se use la institución con fines electorales. Esperemos que no saquen algo nuevo durante el proceso electoral para beneficiar a algún candidato».