Después de perder un voto de confianza, el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier disolvió el Parlamento y convocó a elecciones adelantadas para el próximo febrero, siete meses antes de lo previsto.
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, dio la orden el viernes, de disolver el parlamento y convocar a elecciones anticipadas para el 23 de febrero, posterior al colapso de la coalición gobernante del canciller, Olaf Scholz.
Scholz no cuenta con el voto de confianza desde el 16 de diciembre, cuando lideró un gobierno en minoría, tras los sucesos conflictivos que mantuvo su coalición tripartita, la cual colapsó el 6 de noviembre, al darse el cese de funciones del ministro de Finanzas, por una disputa sobre cómo revitalizar la estancada economía nacional. Los líderes de distintos partidos principales acordaron la celebración de elecciones parlamentarias para el 23 de febrero de 2025, trayendolas siete meses antes de lo que estaba previsto.
Debido a que la Constitución, que se aprobó tras la Segunda Guerra Mundial, prohíbe la autodisolución del Bundestag, la decisión de convocar a los comicios queda en las manos de Steinmeier, y el tiempo que tiene para pensarlo es de 21 días. Dado que una vez disuelto el parlamento, se empieza la cuenta regresiva de 60 días para celebrarse nuevas elecciones. En la prácticas, la campaña electoral ya está en marcha. Lo muestran las encuestas, la delantera del bloque conservador de la oposición liderada por Friedrich Merz, y en segundo puesto al partido de Scholz.
El vicecanciller Robert Habeck, el tercer socio del gobierno, aspira a un cargo con los Verdes ambientalistas, aunque su partido es el más distante a ganar las elecciones. Los sondeos recientes, demuestran que el posible ganador sería Merz como canciller en coalición con otro o varios partidos.
Los temas que han marcado la campaña, son la inmigración, la reactivación económica, que actualmente es lenta y. la ayuda a Ucrania en la guerra que mantiene con Rusia. El populista y antiinmigración, Alternativa para Alemania, o AfD, es uno de los apoyados por las encuestas, nominó a Alice Weidel como candidata a representar a su partido en la cancillería, más sus posibilidades se estrechan, debido a que el resto de partidos niegan el compartir trabajo con la candidata.
Las coaliciones en partidos políticos son algo normal del sistema electoral alemán, sondeos muestran que por sí solo un partido pueda obtener los votos necesarios de la población. Se espera que a los comicios, emprendan semanas de negociaciones para formar un nuevo ejecutivo.
Está sería el cuarto intento de disolución del Bundestag de forma anticipada bajo la Constitución de la posguerra. Ocurrió también con el canciller Willy Brandt en 1972, con Helmut Kohl en 1982 y con Gerhard Schroeder en 2005, utilizó el voto de confianza para propiciar unas elecciones anticipadas en las que Angela Merkel, candidata del centro-derecha, llegó al poder mediante ese margen estrecho de adelanto de elecciones.