El Malecón Simón Bolívar de Guayaquil, en el centro de la ciudad, pasó de ser un lugar enrejado a un espacio con cerco eléctrico, y el Municipio defendió la medida, este miércoles 08 de noviembre.
El cerco se extiende desde la calle 10 de agosto, hasta la calle Loja, centro de la ciudad. La presencia de informales en el Malecón está prohibida desde la regeneración urbana, en las exalcaldías socialcristianas de León Febres-Cordero, y de Jaime Nebot.
Durante su enlace radial de los miércoles, el alcalde de la ciudad, Aquiles Alvarez, dijo que más bien se habían equivocado al decir que sacarían las rejas metálicas, que cubren el perímetro externo de este sitio turístico de la urbe.
Según indicó ahora Alvarez, lo correcto fue colocar el cerco eléctrico por motivos de seguridad y de orden.
Y luego agregó que “hoy más bien tuvimos que poner el cerco eléctrico. Había mucho desorden”.
La decisión de instalar los puntos de electricidad se tomó hace más de un mes en la ciudad, y ningún otro funcionario se había referido al tema hasta ahora. Para la Alcaldía, es una estrategia que evita que los comerciantes informales escalen el enrejado e ingresen a vender sus productos en el Malecón.
Pese a la medida, Alvarez señaló que el Municipio actual respalda a los comerciantes informales, “con orden y control”. En diciembre preparan una feria ciudadana, que incluye el cierre temporal de varias calles al tránsito vehicular, y habilitarlas como corredores comerciales populares.