La tarde del miércoles 14 de agosto de 2024, se registró otro incendio forestal en las laderas del Pichincha, solo una semana después del que había devastado la vegetación de la montaña durante tres días.
El miércoles 7 de agosto, una columna de humo era visible desde el lado oriental de la ciudad en una ladera del Pichincha. Bomberos Quito activó de inmediato un protocolo para controlar el fuego y evitar su expansión. Curiosamente, el incendio comenzó tras una fuerte lluvia en la capital esa misma tarde.
Debido a las condiciones climáticas y la dificultad del terreno, las llamas continuaron hasta el 9 de agosto, a pesar del esfuerzo constante de más de 100 bomberos.
Según información de bomberos, más de 210 hectáreas se vieron afectadas, según un mapeo satelital.
Las lluvias que cayeron el viernes 9 de agosto ayudaron a extinguir las llamas, y Bomberos Quito realizó monitoreos continuos en la zona. Después de 48 horas de intensa lucha, los bomberos informaron que el fuego había sido completamente apagado.
Sin embargo, el miércoles 14, una nueva columna de humo alertó sobre otro incendio en el Pichincha, específicamente en el sector La Pulida. Equipos de apoyo llegaron progresivamente para sofocar las llamas. La rápida respuesta del equipo de Bomberos permitió controlar el incendio y evitar su propagación, con un monitoreo continuo de la ciudad.
Se recuerda a la ciudadanía que, si se detecta una columna de humo, se debe contactar de inmediato al 911. Además, es importante no encender chispas ni quemar basura o matorrales en zonas de vegetación seca. Gabriel Rodríguez, capitán de Bomberos Quito, mencionó que la campaña “Juntos contra el Fuego” está en marcha para educar al público sobre cómo prevenir incendios forestales y qué hacer si se detecta uno, con Chaupi como personaje principal de la campaña.
Rodríguez añadió que las quemas a cielo abierto están prohibidas en Quito. Existe una ordenanza municipal, aprobada en mayo de 2024, que impone sanciones de entre uno y 75 salarios básicos unificados a quienes causen incendios forestales. La sanción no requiere encontrar al responsable en el momento del incendio, ya que, con el apoyo de la Agencia Metropolitana de Control, se pueden imponer multas utilizando la clave catastral.