La presidenta de Perú, Dina Boluarte, propuso este martes que se apruebe la pena de muerte para violadores de menores, luego del asesinato de una niña de 12 años en un barrio marginal de Lima.
La menor fue reportada como desaparecida y días después su cadáver fue hallado oculto debajo de la cama de un presunto agresor, identificado como Gerson J., de 26 años. El hombre fue detenido por la policía y un juez de Lima ordenó prisión preventiva.
Con visible indignación, Boluarte expresó su rechazo ante el asesinato y afirmó que es el momento de discutir medidas drásticas frente a crímenes de tal magnitud.
La pena de muerte en Perú fue abolida en 1979, y era aplicaba solamente a delitos como traición a la patria y homicidio agravado. Para ser aprobada, la propuesta requeriría una reforma constitucional y, además, entraría en conflicto con los compromisos internacionales de Perú, como el Pacto de San José y las normativas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Por otra parte, el presidente del Poder Judicial de Perú, Javier Arévalo, afirmó, que la pena de muerte “es una medida salvaje” y rechazó la posibilidad de que sea objeto de debate en su país.
La actual legislación peruana contempla penas severas para los violadores de menores, incluyendo la cadena perpetua. Según el Instituto Nacional Penitenciario, en la actualidad hay 8.491 personas cumpliendo condena por este tipo de delito en el país.
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