Este lunes 16 de octubre, la Fiscalía de Tarija, ubicada al sur de Bolivia, aseguró que se ha presentado de manera formal una imputación contra el expresidente Evo Morales, quien es acusado por el delito de trata de personas agravado. Esto ha causado que se reactive nuevamente la orden de captura que tenía en su contra desde el pasado mes de octubre, pero que no había sido ejecutada por varios motivos. También se solicitó la alerta migratoria.
Existen dos razones por las que la Policía boliviana no ha podido concretar la orden de captura contra el expresidente, una de ellas debido a la dificultad para localizar su actual paradero y otra debido a los conflictos ocasionados por sus seguidores que, con el fin de defenderlo, salieron a las calles y bloquearon durante 24 días varias carreteras, impidiendo el trabajo a los uniformados.
«Hoy presentamos una imputación formal contra el señor Evo Morales Aima y la señora Idelsa Pozo Saavedra por el delito de trata de personas agravado (…) estamos a la espera de que el juez cautelar señale la fecha y hora para que se lleve a cabo la audiencia de medidas cautelares», declaró la fiscal de Tarija, Sandra Gutiérrez.
El expresidente Evo Morales enfrenta cargos penales por los delitos de trata de personas, pero además es culpable por estupro con una menor de edad. A Morales se lo vincula con esta menor de edad, debido a que se cree que tuvo un hijo con ella. Esta suposición se da porque en el proceso, los padres de la supuesta víctima se aprovecharon de ella para lucrarse entregándola a disposición del expresidente por supuestos «favores».