IFRC destina 4,5 millones de dólares a víctimas del derrame de petróleo y las lluvias en Ecuador.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC) anunció el 25 de marzo de 2025 una asignación de 4,5 millones de dólares para asistir a las comunidades afectadas en Ecuador por el derrame de petróleo en Esmeraldas y las intensas lluvias que azotan el país.
Recursos destinados para los afectados
La IFRC brindará apoyo a 176,200 personas durante los próximos 12 meses, centrando su intervención en la provisión de agua potable, atención médica, artículos esenciales de higiene personal y para la limpieza del hogar. Además, se implementará un sistema de transferencias en efectivo a las familias más afectadas.
Para asegurar que la ayuda llegue rápidamente, la organización activó su fondo de emergencia para desastres, desembolsando hasta la fecha más de 563,683 dólares de los 4,5 millones anunciados.
Respuesta ante el derrame de petróleo
El 13 de marzo de 2025, un deslizamiento de tierra causó la rotura de un oleoducto en Esmeraldas, generando un derrame de petróleo que afectó a varias ciudades, incluida la capital provincial. En respuesta, la IFRC ha instalado tres plantas potabilizadoras de agua en la zona, produciendo 152,000 litros de agua limpia en dos días, suficiente para cubrir las necesidades de 10,000 personas.
Desde el inicio de la emergencia, voluntarios de la Cruz Roja Ecuatoriana han estado trabajando en el terreno para distribuir agua, ofrecer primeros auxilios y evaluar el impacto del desastre.
Enfrentando las lluvias y sus consecuencias
Ecuador también se enfrenta a graves inundaciones debido a las fuertes lluvias que comenzaron a principios de 2025, afectando principalmente la zona costera. Este desastre ha dejado 20 víctimas mortales y más de 115,000 personas afectadas.
Según Loyce Pace, directora regional de la IFRC para América, el país atraviesa una doble emergencia de salud pública debido a la contaminación del agua, la proliferación de enfermedades y la inseguridad alimentaria, exacerbadas por el derrame y las inundaciones.
Foco en las zonas más vulnerables
La respuesta de la Cruz Roja se centrará en las zonas más devastadas, especialmente en albergues temporales y comunidades rurales, ribereñas e indígenas, quienes enfrentan mayores riesgos medioambientales y la pérdida de sus medios de vida tradicionales.
El presidente de la Cruz Roja Ecuatoriana, Roque Soria, destacó la importancia del apoyo internacional para una respuesta más eficiente y para acelerar la recuperación a largo plazo de las comunidades afectadas.