El expresidente Lenín Moreno, actualmente en exilio autoimpuesto en Paraguay, expresa su apoyo a Daniel Noboa en las próximas elecciones. Responde a las recientes críticas contra la decisión del equipo periodístico de El Comercio de entrevistar a Guacho, una figura controvertida, sugiriendo que fue una decisión tomada por el equipo sin comprender plenamente los riesgos que implicaba. Moreno defiende las medidas tomadas durante su presidencia, afirmando que se hicieron esfuerzos para lograr la liberación de los periodistas Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra, quienes fueron secuestrados y posteriormente asesinados. Insiste en que el gobierno hizo todo lo posible por liberarlos.
En su declaración, Moreno rechaza las acusaciones de la opinión pública, en donde lo tildan de mentiroso y acusa a sus críticos de revictimizar a las familias de los periodistas. Moreno rebate estas acusaciones, calificándolas de falsas y difamatorias. Describe a quienes están detrás de estos ataques, como personas con segundas intenciones, a quienes afirma ser responsables de difundir desinformación.
En cuanto a su relación con Daniel Noboa, Moreno aclara que, si bien no son amigos cercanos, lo considera alguien con el potencial para liderar el país eficazmente. Moreno enfatiza que no mantiene una conexión personal profunda con el actual presidente, pero ha expresado su apoyo al presidente-candidato, reconociendo sus posibilidades de éxito en la contienda política.
Moreno también aborda la especulación política en torno a Luisa González y su posible salida del partido RC5. Si bien reconoce que siempre existe la posibilidad de un cambio, minimiza la probabilidad de que González traicione a la Revolución Ciudadana como lo hizo él. Moreno cree que la salida de González del partido es improbable y sostiene que Daniel Noboa sigue siendo el favorito en la contienda.
Por lo tanto, si bien los comentarios de Moreno generan controversia, se mantiene firme en su apoyo a Daniel Noboa, presentándolo como un candidato viable para el futuro liderazgo de Ecuador. A pesar de las tensiones políticas actuales y las críticas a sus acciones, Moreno sostiene sus declaraciones anteriores y reafirma su confianza en el Ejecutivo.