El edificio del Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol) fue allanado por las autoridades fiscales, con el objetivo de hallar indicios de pruebas fiables que demuestren la presunta participación de una red de peculado, que se habría cometido para garantizar la compra de pruebas Covid-19, pero a través de sobreprecio.
Esta investigación es realizada por la Unidad de Transparencia y Lucha contra la Corrupción de la Fiscalía General del Estado. Esta entidad ha trabajado en la recuperación de los archivos originales del contrato, cuya documentación estipula el trámite respectivo que los altos cargos policiales permitieron que se ejecute.
Estos acuerdos fueron desarrollados en plena emergencia sanitaria, sin embargo, varias irregularidades fueron evidenciadas tras las investigaciones que los medios de comunicación y legisladores realizaron. El 29 de abril de 2020, el Isspol comunicó que nombró a una comisión especial para que se encargue de la adquisición de 40 000 pruebas rápidas de Covid-19.
Los policías nacionales usaron aquellas pruebas, ya que por medio de esos implementos, se podría detectar la infección de los mismos de una manera temprana, para que se tomen todas las precauciones necesarias sanitarias, con el fin de evitar un mayor contagio.
Foto: Cortesía.