Una nueva forma de estafa bajo el esquema Ponzi ha perjudicado a decenas de personas en Ecuador. La empresa Craft, dedicada a la captación de dinero, cerró abruptamente sus operaciones y abandonó el país sin dar explicaciones a sus «inversionistas».
La Superintendencia de Bancos informó el viernes 6 de septiembre de 2024 que dicha empresa no contaba con autorización para realizar actividades exclusivas del Sistema Financiero Nacional. No obstante, la advertencia llegó demasiado tarde, ya que miles de personas ya habían invertido su dinero con la expectativa de obtener grandes beneficios a corto plazo.
Craft no estaba registrada en la lista de empresas autorizadas por la Superintendencia de Bancos, pero operaba en el país recibiendo ‘inversiones’ que oscilaban entre un dólar y 1000 dólares semanales. A cambio, los participantes debían fabricar pulseras y, según las publicaciones de la empresa en Facebook, cuanto más invertían, mayores eran las ganancias que obtenían.
Los participantes también podían recibir premios como celulares y dispositivos tecnológicos. Además, se les ofrecía acceso a una plataforma digital para retirar las supuestas ganancias.
La empresa utilizaba influencers de redes sociales, como TikTok, para atraer a más personas, quienes recibían pagos por captar nuevos inversionistas.
Desde finales de agosto de 2024, la oficina de Craft en Quito está cerrada y la plataforma no ha realizado más publicaciones en redes sociales.