Se informa que no existió un acuerdo apropiado entre trabajadores y empleadores, en base a esto el Ministerio de Trabajo definió que el nuevo Salario Básico unificado para este 2025 en todo el país, tuviera un incremento de solo USD 10, elevandolo a 470 dólares, con respecto a este 2024.
Durante las negociaciones, las posturas entre los sectores empresarial y laboral mostraron una amplia brecha. Mientras los empleadores planteaban un aumento de entre 4 y 6,95 dólares, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) demandaba un incremento de 102 dólares. Como existía un evidente desacuerdo, no hubo un trato apropiado entre empleadores y trabajadores, en las reuniones del Consejo de Salarios.
En comparación a los dos años anteriores, 2022 y 2023, el alza del salario básico fue de USD 25, en cada caso. En contraste, países como Colombia registran 323 dólares y Argentina apenas logra alcanzar los 163 dólares de salario mínimo mensual. Según un informe del portal de Data Statista, Ecuador ocupa el cuarto lugar de salarios mínimos en América Latina, Costa Rica lidera el ranking con 675 dólares mensuales, le sigue Uruguay con 556 dólares y Chile con 532 dólares.
El Ministerio de Trabajo precisó que el acuerdo alcanza y beneficia a diversos sectores laborales, incluyendo trabajadores de pequeñas industrias, de maquila, agrícolas, empleados domésticos, artesanos y microempresarios. También, se estableció una tabla sectorial con 2.169 ítems de cargos que detalla los salarios mínimos por rama de actividad.
Para el incremento salarial se consideraron diversas políticas económicas y sociales del régimen actual, que buscan asegurar una efectiva redistribución de la riqueza, para evitar todo tipo de inconvenientes o faltas de constitucionalidad, garantizando la satisfacción de las necesidades de todos los ciudadanos que son trabajadores y de sus familias. El nuevo decreto busca un equilibrio en las necesidades de trabajadores y empleadores, dentro de un contexto económico complejo, manteniendo al territorio Ecuatoriano dentro de los países latinoamericanos, con mejores niveles de ingreso mínimo garantizado.