La Fuerza Aérea Ecuatoriana despliega aviones Súper Tucano para brindar vigilancia las 24 horas a las provincias de Guayas y Manabí durante las vacaciones de Semana Santa. Estas regiones son consideradas focos de violencia en el país y, según el Ministerio de Defensa, ahora son cada vez más el blanco de patrullas aéreas militares con equipos de última generación y personal capacitado.
El trasfondo de esta medida es la escalada del conflicto armado interno en Ecuador. En Guayas y Manabí operan numerosos grupos criminales, que el gobierno califica como organizaciones terroristas. Estas zonas costeras también son corredores clave para el tráfico de drogas y, por lo tanto, son un foco particular de las fuerzas de seguridad del Estado.
Desde el 12 de abril rige en estas zonas el estado de excepción, vigente por 60 días mediante el Decreto 599. El despliegue del avión Súper Tucano se produce también poco después de un operativo en el sector de hidrocarburos de Manabí para prevenir posibles actos de sabotaje, apenas días después de una masacre en El Carmen que dejó doce muertos.
Hay particular alerta debido a un informe de inteligencia de que sicarios están planeando ataques contra el presidente Daniel Noboa, miembros de su gabinete e infraestructura estatal como puentes y bancos. Estas amenazas pretenden desestabilizar aún más el país mediante actos de violencia selectivos.
Según fuentes gubernamentales, escuadrones de la muerte de México y otros países ya están en Ecuador para ejecutar atentados. Además, existen temores de disturbios en las calles, lo que subraya la necesidad de una mayor vigilancia aérea por parte de las fuerzas armadas.