Desde las primeras horas de este martes 14 de octubre, manifestantes bloquearon la vía Cuenca‑Loja en el sector Sinincapac, cantón Saraguro, impidiendo el tránsito vehicular y generando un fuerte impacto en la movilidad interprovincial. Los ciudadanos instalaron barricadas con piedras, palos y neumáticos, cortando ambos sentidos de la carretera y provocando largas filas de vehículos retenidos, mientras los conductores esperaban que se despejara la vía.
Los manifestantes, en su mayoría campesinos e indígenas, exigen la derogación del Decreto Ejecutivo 126, que eliminó el subsidio al diésel, y reclaman mejoras urgentes en salud, educación, seguridad y otros servicios básicos que consideran insuficientes en las comunidades rurales. Voceros locales señalaron que el bloqueo es una medida de presión al Gobierno Nacional para que escuche las demandas acumuladas durante años.
La protesta forma parte del 23º día del Paro Nacional 2025, convocado por la Conaie y organizaciones sociales de varias provincias andinas y amazónicas. El paro tiene como epicentros a las provincias de Cotopaxi, Chimborazo, Pichincha e Imbabura, y se ha extendido a sectores rurales de Azuay, Loja, Cañar y otras, generando bloqueos, marchas pacíficas y enfrentamientos aislados con la policía.
Testigos describen que la jornada de hoy transcurrió tensa, con familias enteras participando de la protesta mientras funcionarios de tránsito y seguridad intentaban coordinar rutas alternas. Los vehículos retenidos incluían transporte público, camiones de carga y automóviles particulares.
Líderes comunitarios insisten en que la medida continuará hasta recibir una respuesta formal del Ejecutivo y que no levantarán los bloqueos hasta obtener compromisos claros sobre sus demandas. Organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales han hecho un llamado a que las fuerzas de seguridad respeten los derechos de los manifestantes y eviten el uso excesivo de la fuerza, recordando que la protesta pacífica es un derecho constitucional.
