El presidente Daniel Noboa suspendió sus actividades públicas en la Sierra debido a la prolongación del paro. Desde el Ejecutivo tampoco se ha emitido un pronunciamiento frente a las propuestas de diálogo de varias organizaciones que han surgido en las últimas horas.
La semana pasada, el presidente Daniel Noboa realizó actividades públicas en localidades de Latacunga, Imbabura y Tungurahua, en la sierra norte, en medio de las paralizaciones de los movimientos indígenas.
Durante los primeros días del paro, la estrategia del presidente fue mostrarse cercano a las comunidades que no rechazan sus políticas económicas, como la eliminación del subsidio del diésel. Asistía a estos lugares acompañado de ministros y otras autoridades, con quienes entregaba líneas de créditos para agricultores y ofrecía un breve discurso.
En esta segunda semana de manifestaciones, Noboa dejó de presentarse públicamente en esos territorios. El momento decisivo se dio la noche del domingo, cuando el convoy humanitario que encabezaba fue atacado con bombas molotov.
Después de ese hecho, Noboa tuvo solo una aparición pública: ocurrió el lunes en Ibarra, en compañía del gabinete de seguridad. Allí surgieron los primeros intentos de diálogo entre las comunidades indígenas mediante autoridades locales, pero esos acercamientos no prosperaron.
De acuerdo con Carolina Jaramillo, vocera de la Presidencia de la República, Noboa seguía trabajando desde Latacunga la mañana de este miércoles. Hasta el momento no existe un pronunciamiento público del mandatario sobre los múltiples llamados al diálogo.
Finalmente, en medio de ese silencio, Jaramillo realizó una publicación en su cuenta de la red social X en la que escribió: “lo dije y lo reitero, no toleraremos el chantaje como forma de diálogo, ni la violencia venga de donde venga. No vamos a retroceder”