La lamentable noticia conmocionó a una familia brasileña cuyo bebé murió por el coronavirus cuatro días después del nacimiento.
Su madre gozaba de buena salud durante el parto, pero con el tiempo, el pequeño desarrolló complicaciones respiratorias a causa del covid-19. La muerte no solo afectó a los padres del niño, sino también al médico, quien le aseguró: “Nunca habían visto algo así. Adriana Godoy está satisfecha con el embarazo. Nueve meses de espera finalmente llegaron el miércoles pasado.
En un hospital de Sao Paulo, dio la bienvenida al mundo a su hijo: “Es naturalmente hermoso, sano y perfecto”, publicó un artículo en las redes sociales. La madre exuda alegría, pero cuando el bebé presenta los primeros síntomas, esta alegría comienza a disminuir.
El médico lo examinó para detectar el coronavirus y confirmó que era positivo. Su salud se deterioró, por lo que fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos.
“Mostraba un empeoramiento en cada visita. Le daban antibióticos para bacterias, porque no imaginaban que podía tener coronavirus. Los medicamentos nunca hicieron efecto”, agregó la mujer.
El pequeño no mejoraba y un día después de nacer fue intubado. La incertidumbre crecía y crecía, pero lamentablemente, terminó falleciendo este domingo.
Tras detectar el positivo del lactante, su madre también fue sometida a un test e igualmente dio positivo. Lo peculiar de esta situación es que era la segunda vez que ella se contagiaba.
Lo anterior, porque en julio de 2020 había contraído el covid-19 y estaba asintomática antes de quedar embarazada del bebé fallecido, según señaló la mamá. Por lo mismo, los doctores creen que el menor se contagió en el útero de la mujer.
Todo se habría tratado de una reinfección, entonces enviaron muestras para ser analizadas y así detectar la eventual presencia de una variante del coronavirus.
Para Adriana, este caso es tan triste como impactante. Solicitaron una investigación porque ella asegura que los malestares en su hijo comenzaron cuando lo tuvo en sus brazos: “Queremos respuestas”.
“Buscó mi pecho para su leche, se quedó unos minutos más con nosotros y, de repente, empezó a tener dificultad para respirar, parecía que quería llorar y no podía”, expresó.