El presidente Guillermo Lasso afirma que sostuvo una conversación telefónica con el expresidente Rafael Correa. Expresó que a su opositor le interesa “nada más su libertad, su impunidad, solo de la de él. Ni siquiera la de su gente Correa es el pasado, hablemos del futuro”.
Este 7 de octubre, a través de su red social Twitter, Correa lo tildó de “mentiroso compulsivo”. El exmandatario dijo, “Tuvo que reconocer que él me llamó en realidad fue a mediados de año para después insultarme públicamente”.
El 26 de septiembre, Correa comunicó sobre la llamada. “Hace unos meses me llamó para tratar nuevamente de llegar a un acuerdo. Y ahí sí lo puse en su lugar, le dije de todo. Le reclamé porque me había acusado de dar parte del territorio nacional para el narcotráfico”, relató en Radio Pichincha.
El rumor de un supuesto pacto con el correísmo se activó cuando Ricardo Rivera, tío del ex vicepresidente Jorge Glas, obtuvo un beneficio en su condena por el caso Odebrecht. Y luego, tras la excarcelación de Jorge Glas. El PSC enumeró cuatro “hechos innegables” que probarían un pacto entre el correísmo y el oficialismo.
“¿Qué pacto? No existe, no ha existido y probablemente jamás existirá”, afirmó el primer mandatario el 13 de abril. Si Correa es parte del pasado, es una incoherencia política el haber dialogado con una persona que representa todas las alteraciones que pueden existir en el ámbito democrático. No es buscar el interés de la nación, es un intento desesperado por sobrevivir como Presidente”, sostuvo Alfredo Espinosa, analista político y miembro del Colectivo Ciudadano Voces por la Democracia.
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