La madre de María Belén Bernal, Elizabeth Otavalo, presentó este miércoles 4 de enero de 2023 una acusación particular en contra de Germán Cáceres, principal sospechoso del femicidio de su hija, y contra el teniente de policía, Alfonso Camacho.
“Que la justicia haga lo que corresponde. Que la justicia cumpla con su deber y no sea ciega”, pidió Elizabeth Otavalo, en los exteriores de la Casa de Justicia, en Carcelén, donde se presentó el documento.
El abogado Galo Quiñonez explicó que el objetivo es tener una actividad activa en el proceso penal contra Cáceres. “Ya no solo como víctimas, sino como acusadores particulares. Tener voz, voto y presentar todos los elementos de convicción que se convertirán en pruebas. En la etapa de juzgamiento, como víctimas y acusadores particulares cuantificar la reparación integral”, explicó.
Quiñonez explicó que la acusación contra Camacho se da porque cuentan con todos los elementos que probarían su responsabilidad en este caso. También dijo que esperarán la ampliación de la versión de Germán Cáceres para conocer el alcance de la participación de Joselyn Sánchez, por lo que no presentaron, por ahora, la acusación en contra de la cadete.
Esta ampliación de versión fue solicitada la mañana de este miércoles. En el transcurso del día serán notificados, tanto Cáceres, como sus abogados.
La familia de Bernal espera que Cáceres no se acoja al derecho al silencio para que exista un baño de verdad. Además, esperan que acuda, de manera presencial, a las audiencias dentro del proceso.
“Después del cierre de instrucción fiscal, la audiencia de llamamiento a juicio será en la Casa de Justicia de Carcelén y, la audiencia de juzgamiento, tendrá que darse en el Tribunal de Garantías Penales de Iñaquito”, agregó.
Quiñonez explicó que Cáceres no podría acogerse a la cooperación eficaz porque, dijo, “se ha logrado recopilar todas las pruebas necesarias para su sentencia” y Cáceres no participó desde un inicio con información veraz de la ubicación del cuerpo de Bernal.
Por último, solicitarán que Cáceres comparezca de manera presencial; es decir, realizar el traslado desde Guayaquil hasta Quito, y piden que se cumpla con los protocolos para garantizar su seguridad.
Cáceres podría enfrentar una condena de hasta 34 años por agravantes.