Después de 45 días bajo el estado de excepción en Ecuador, se llevaron a cabo 118,055 operaciones contra el crimen organizado por parte de la Policía y las Fuerzas Armadas. El presidente Daniel Noboa ha anunciado la extensión de esta medida en el país, destacando su efectividad.
Noboa expresó: «Hay que extenderlo por 30 días más, todavía no hemos resuelto todos los problemas, pero este estado de excepción nos ha permitido, como Gobierno, a través de las Fuerzas Armadas y la Policía, tener mayor control».
Un día después de la implementación del estado de excepción, el 9 de enero, Noboa emitió el decreto 111, reconociendo la existencia de un conflicto armado interno para fortalecer la «guerra» contra las bandas criminales.
Según el último informe del Gobierno, de todas las operaciones conjuntas realizadas desde el 9 de enero, 160 se dirigieron contra grupos calificados como «terroristas». Las fuerzas de seguridad han abatido a ocho personas identificadas como miembros de estos grupos y detenido a 9,473 personas, incluyendo 241 bajo cargos de «terrorismo».
En un discurso en la base naval de Salinas, el presidente destacó la labor del Bloque de Seguridad, una estrategia conjunta de militares y policías en el contexto del conflicto armado.
«Ustedes (militares y policías) ponen orden en las calles quitando arsenal y privilegios, para sembrar valores cívicos. Algo nunca antes visto en el país», mencionó.
El Gobierno informó que se logró recapturar a 34 de los aproximadamente 90 reclusos que se fugaron de las cárceles a principios de año, uno de los motivos para declarar el estado de excepción. Sin embargo, durante la vigencia de la medida, tres reclusos de la cárcel de Cotopaxi escaparon el 22 de febrero.