La mañana del 18 de julio, un hombre fue asesinado en la cuarta etapa de El Recreo, en Durán, un día después de que el cantón fuera intervenido por el Gobierno. El crimen ocurrió en un parqueadero de la zona y el cuerpo quedó tendido en la calzada tras recibir varios impactos de bala. Según un reporte del canal RTS, los agresores llegaron en un vehículo, ingresaron a través de las rejas metálicas del lugar y le dispararon.
Este asesinato se produce en medio de la intervención de aproximadamente 1.100 policías y militares desplegados en Durán desde el 17 de julio. Ese día, se llevaron a cabo 80 allanamientos y se reportaron siete detenidos. El presidente Daniel Noboa, quien había prometido una intervención contundente en el cantón desde el 11 de julio, estuvo presente durante estas acciones.
Durante la intervención, Noboa ingresó al sector de La Delia, en el sureste de Durán, acompañado de tanquetas militares. En su discurso, el presidente aseguró que «el tiempo de los Glas y Muentes se acabó», prometiendo que la acción militar y policial no se limitaría a un solo día, sino que se mantendría hasta que las mafias abandonaran el cantón.
A pesar de los operativos, el 18 de julio, Noboa cumplió con su agenda en Los Ríos. Este suceso destaca la compleja situación en Durán, donde el crimen organizado impone sus propias normas y ejerce un poder paralelo, desafiando los esfuerzos del Gobierno para restablecer el orden y la seguridad en la zona.