El miércoles 24 de julio no fue un buen día para los equipos ecuatorianos en la Copa Sudamericana, tres de los cuatro equipos que participaban quedaron eliminados del torneo, Barcelona SC e Independiente del Valle fueron derrotados como visitantes: los amarillos perdieron 3-2 contra Bragantino en Brasil y los rayados cayeron 1-0 frente a Boca Juniors en Argentina, además, Universidad Católica empató 1-1 como local con Libertad de Paraguay, lo que resultó en su eliminación.
La eliminación no solo fue un golpe deportivo, sino también económico, la Conmebol otorga recompensas económicas por los méritos deportivos, como ganar partidos. En este caso, los tres equipos ecuatorianos perdieron la oportunidad de recibir $115.000 cada uno por victorias en sus respectivos encuentros, si Barcelona SC e Independiente del Valle hubieran ganado sus partidos y avanzado a los octavos de final, habrían obtenido $715.000 cada uno, incluso si hubieran avanzado a la siguiente ronda por penales, habrían recibido $600.000. Estas cifras reflejan la considerable pérdida económica que sufrieron ambos clubes al ser eliminados del torneo.
A pesar de la eliminación, los tres equipos ecuatorianos recibieron $500.000 cada uno por participar en los playoffs de la Copa Sudamericana, esta cantidad aunque significativa, es menor en comparación con lo que podrían haber ganado de haber avanzado a las siguientes rondas.
La eliminación de Barcelona SC e Independiente del Valle de la Copa Sudamericana no solo representó una pérdida deportiva, sino también un golpe económico significativo, las oportunidades de ingresos adicionales se esfumaron, afectando las finanzas de los clubes y sus planes institucionales, a pesar de haber recibido una compensación por participar en los playoffs, las sumas perdidas por no avanzar en el torneo subrayan la importancia de los éxitos deportivos en la estabilidad económica de los equipos.