La institución informó que investigará el caso, aunque advirtió que el proceso podría tardar debido a los implicados. Boscán y su familia actualmente se encuentran en Canadá, donde solicitaron asilo.
La Policía Nacional rechazó las denuncias hechas por el periodista Andersson Boscán y su esposa Mónica Velásquez, quienes pidieron asilo al Gobierno de Canadá para proteger su seguridad y la de su familia.
El 10 de septiembre, un video circuló en redes sociales donde ambos periodistas, del medio digital La Posta, anunciaron que dejaron Ecuador debido a las continuas amenazas que recibían tras exponer casos relacionados con la delincuencia organizada.
En su declaración, señalaron que la Dirección General de Inteligencia y el Sistema de Inteligencia de la Policía Nacional los vigilaban a ellos y a sus dos hijas, siguiendo sus rutinas y rutas, incluso utilizando drones.
Boscán comentó que en Ecuador contar historias implica arriesgar la vida y ser criminalizado. Su esposa añadió que continuarán relatando historias desde el extranjero.
Recibieron ayuda
El periodista -que también está en la mira de la Fiscalía, por ser mencionado en chats de casos relacionados con el narcotraficante Leandro Norero- solicitó la ayuda a organizaciones como Amnistía Internacional, Reporteros Sin Fronteras y hasta al Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para poder ahora estar en Canadá y dejar atrás -como dijo su esposa- el encierro al que debían estar supeditados por el riesgo que corrían.
Velásquez señaló que su vida y la de su familia cambió hace cinco años porque ya no podían estar en lugares públicos por las amenazas existentes.
Mientras, Boscán añadió que su salida definitiva de Ecuador obedece a que sus hijas merecen una vida real porque todo tiene un límite.
Policía rechaza declaraciones de Andersson Boscán
En respuesta a las declaraciones de Boscán y su esposa, la Policía Nacional, en un comunicado emitido la noche del 13 de septiembre —tres días después de las acusaciones—, rechazó categóricamente las afirmaciones de los periodistas.
«La institución rechaza firmemente cualquier tipo de persecución o amenaza que ponga en peligro la vida de cualquier ciudadano», publicó la Policía en sus redes sociales.
Asimismo, la entidad se comprometió a facilitar las investigaciones necesarias para esclarecer los hechos denunciados, aunque señaló que el proceso podría tomar tiempo debido a la complejidad de los sujetos implicados y sus conexiones.
Además, la Policía subrayó que no permitirá verse involucrada en actos que puedan comprometerla y aclaró que cualquier irregularidad detectada ha sido debidamente sancionada.
Foto cortesía