Con solo 19 años, la británica Belle Delphine acumula más de cuatro millones de seguidores en la red social Instagram. El pasado 1 de julio del 2019, la influencer anunció que vendería en pequeños frascos el agua con la que se baña. El producto, según medios internacionales, se agotó en cuestión de horas.
El producto tenía un precio de USD 30 y estaba dirigido a «todos los chicos gamers sedientos», según anunció la joven en su cuenta de Instagram. La publicación en la que sacó a la venta el agua tiene hasta este 15 de julio del 2019 más de 571 000 ‘me gusta’.
Según informa el medio británico The Guardian, la joven obtuvo idea de sacar al mercado el agua con la que se baña de una broma que circula entre sus seguidores. En declaraciones al periódico, Delphine contó que «muchas personas comentaban en mis fotos diciendo que se tomarían el agua en la que me baño. Pensé en ideas un día y solo se me vino a la cabeza la duda: ¿qué pasaría si realmente embotellara y vendiera el agua de mi bañera?».
La influencer dice sentirse afortunada de «poder hacer cosas locas y ver cómo el mundo reacciona ante ellas y definitivamente hay disfrute en eso, aunque a veces me asuste un poco. Tengo reacciones más grandes hacia mi contenido más extraño, pero creo que eso solo es posible porque hago contenido riesgoso».
El 4 de julio del 2019, la influencer anunció que el producto que sacó a la venta se había agotado. «Haré más pronto, pero realmente estos han sido un par de días extraños tomando tantos baños», dijo. «No esperé que tantas personas estarían tan interesadas, pero si querías una, estarán de regreso pronto», añadió la joven en su publicación.
En la página web en la que se ofertaba el agua, la influencer advirtió que las botellas de esta eran solo para «fines sentimentales». Sin embargo, dice The Guardian, en las redes han sido publicados varios videos de fanáticos de la joven bebiendo o utilizando el agua en cigarrillos electrónicos.
Un YouTuber difundió el 6 de julio un video en el que se muestra a si mismo bebiebdo el líquido y utilizándolo para preparar comida. Él confesó no ser un fan de Belle Delphine, «solo compré (el agua) para poder hacer un video con ella».
La influencer dijo a The Guardian que si bien esta ha sido una experiencia «divertida» está lista para nuevas cosas. «Tengo un diario junto a mi cama lleno de ideas locas. No sé qué va a superar esto, pero estoy ansiosa de ver qué sigue», concluyó.
Fuente: El Comercio