Las autoridades en Cusco, Perú, han desmantelado una red dedicada al tráfico de recién nacidos que supuestamente vendía bebés en el extranjero, principalmente en Europa. La historia comenzó cuando una mujer llamada Fanny Hurtado intentó hacerse pasar por la madre de un bebé en un centro médico en Cusco.
El caso fue descubierto el 4 de septiembre de 2023 cuando Hurtado llevó al supuesto bebé al centro de salud Manco Cápac. Las enfermeras y obstetricias notaron que algo estaba mal ya que ella no parecía haber dado a luz recientemente y no tenía la cartilla de vacunación del bebé. La policía fue alertada y se investigó el caso.
Hurtado confesó que había pagado tres mil soles (811 dólares) por el bebé a una mujer llamada Rosa Doris Huayhua Mamani, de 55 años, lo que implicaba un caso de trata de personas por venta de niños.
La investigación reveló que Hurtado había registrado múltiples salidas del país sin registros de su regreso, lo que llevó a la hipótesis de que actuaba como intermediaria para vender bebés. Además, se sospecha que coordinaba con un centro obstétrico clandestino en Cusco donde se realizaban abortos, convenciendo a las mujeres embarazadas que deseaban interrumpir su embarazo para entregar a los recién nacidos a quienes podían tener hijos.
Hurtado está detenida, pero no es la única involucrada. La hija de Rosa Huayhua, Lizeth Zambrano Huayhua, quien dirigía supuestamente el centro obstétrico clandestino, también fue detenida. Se han encontrado chats que sugieren que al menos veinte bebés fueron comercializados, con un precio promedio de 4.200 soles (1.135 dólares) por bebé. Se continúa investigando la venta de más bebés en este caso.