La Central de Trabajadores-Autónoma (CTA-A) ha manifestado su rechazo a la intervención de la Universidad Nacional Madres de Plaza de Mayo (UNMA) por parte del Gobierno de Javier Milei. Esta medida, que implica la destitución de la rectora Cristina Caamaño, electa recientemente por asamblea, ha sido descrita por la CTA-A como una grave violación al sistema educativo y a la vida democrática.
Según el comunicado emitido, la intervención se produce tras siete meses de desfinanciamiento y la negativa de una medida cautelar que buscaba cesar la retención de fondos a la UNMA. La CTA-A denuncia que estas acciones forman parte de un proceso más amplio de desmantelamiento de políticas de memoria, reparación y derechos humanos, en un contexto de discurso oficial que califican como intolerante y negacionista de la historia reciente del país.
Finalmente, la organización sindical reafirma su compromiso con la verdad, la justicia y la memoria de los detenidos desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983), y declara su firme oposición a la intervención en la UNMA, subrayando que la fuerza de la memoria no será silenciada.
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