El Ejército Ecuatoriano, mediante la Brigada de Selva Nº 19 «NAPO» y apoyo de inteligencia militar, descubrió una refinería clandestina de petróleo en el sector Chone 1, en el cantón Lago Agrio, cerca de la reserva ecológica Cuyabeno. El complejo ilegal podía procesar hasta 18.000 galones de crudo semanalmente, produciendo 10.000 galones de gasolina blanca, destinada a la fabricación de sustancias ilícitas.
La refinería, que ocupaba un kilómetro cuadrado, tenía cuatro puntos de refinamiento, tanques cisterna y sistemas de bombeo para transportar crudo y gasolina hacia la frontera. Se incautaron 10.500 galones de crudo y 5.000 galones de gasolina lista para su distribución.
La operación representó una pérdida económica significativa para el crimen organizado, estimada en unos 200.000 dólares semanales. Tras asegurar la zona, se coordinaron acciones con las autoridades para evacuar y destruir el complejo, así como investigar el daño ambiental en la región.
El Ejército reafirmó su compromiso con la defensa de la soberanía y seguridad nacional, demostrando su capacidad para combatir actividades ilegales que afectan el bienestar y el medio ambiente del país.
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