Desde la medianoche de este lunes 12 de mayo del 2025, la Policía Nacional del Ecuador retomó el mando operativo sobre el tránsito vehicular en 25 corredores viales considerados de alta complejidad a nivel nacional. Esta competencia regresa a la institución luego de 14 años bajo la administración de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), a la que se había delegado en 2011.
La Dirección Nacional de Control de Tránsito y Seguridad Vial pasa ahora a liderar este proceso, en una acción articulada con la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) y la propia CTE. El propósito central es fortalecer la seguridad vial y ciudadana en rutas donde se reportan con frecuencia robos, accidentes y otras amenazas para los conductores y pasajeros.
Estas 25 rutas priorizadas están ubicadas en 13 provincias del país y poseen un alto valor estratégico debido a su conexión con puertos comerciales, zonas industriales y centros logísticos. El Estado apuesta por una reconfiguración del sistema de vigilancia en estos puntos críticos.
Para este operativo se ha dispuesto inicialmente el despliegue de más de 2.000 policías, a quienes se sumarán 700 efectivos adicionales en los próximos días. Este personal contará con recursos logísticos que incluyen camionetas, sistemas de comunicación, cámaras de detección facial y unidades móviles.
El equipamiento destinado para la operación abarca 124 camionetas de patrullaje, 557 radios para zonas con poca cobertura, así como 12 furgones con sistemas de reconocimiento facial. Todo este conjunto busca optimizar la respuesta ante emergencias y mejorar la capacidad de fiscalización en carretera.
Con esta medida, el Gobierno busca reducir los índices de criminalidad y siniestralidad en las vías, y recuperar la confianza de los ciudadanos en el control estatal del tránsito y la seguridad vial en sectores clave del país.
