El 22 de marzo, un grupo de 24 miembros del Congreso de los Estados Unidos solicitó al presidente Joe Biden que otorgue a Ecuador el Estatuto de Protección Temporal (TPS) debido al conflicto interno en el país.
El Estatuto de Protección Temporal posibilitaría que los ciudadanos ecuatorianos con estatus migratorio irregular en Estados Unidos puedan disfrutar de varios beneficios, como acceso a la seguridad social, empleos formales con una remuneración adecuada, y la posibilidad de evitar procedimientos de deportación.
Estos legisladores, bajo la dirección de los representantes demócratas Alexandria Ocasio-Cortez, Rob Menéndez y Adriano Espaillat, remitieron una carta a Biden en la cual expresaron que, durante los últimos dos años, Ecuador ha experimentado un incremento significativo en los niveles de violencia.
El 8 de enero, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, quien acababa de asumir el cargo hacía menos de dos meses, decretó el estado de excepción por un período de 60 días debido a una serie de ataques y actividades violentas perpetradas por bandas criminales en diversas ciudades del país.
El decreto fue una respuesta a varios hechos de violentos, incluyendo disturbios en las cárceles que desencadenaron una intervención inmediata por parte de las fuerzas de seguridad. Los legisladores expresaron en la carta su queja, indicando: «Aunque la Administración Biden ha ofrecido ayuda al Gobierno ecuatoriano, esta no aborda los más de 450.000 inmigrantes ecuatorianos que viven en los Estados Unidos”.
Los demócratas expresaron su preocupación por la continua intimidación hacia la prensa, las instituciones médicas, los líderes comunitarios y el público en general por parte de grupos armados. En un comunicado, los congresistas explicaron que otorgar el TPS ofrecería un alivio significativo para numerosos ciudadanos ecuatorianos al mantener la unidad familiar y brindarles la oportunidad de obtener permisos de trabajo.
«A pesar de la inseguridad bien documentada que llevó a estos constituyentes a hacer el viaje peligroso a través de la Brecha del Darién, muchos de ellos están en proceso de expulsión y enfrentan una deportación inminente», lamentaron.
La iniciativa también ha generado respuesta por parte de diversas organizaciones y figuras públicas, como el responsable de Inmigración de Make the Road New York, Vicente Mayorga. Él afirmó que, mientras se solicita el TPS, la «lucha continua para asegurar protecciones permanentes para todos los inmigrantes».