Aquiles Alvarez, el alcalde de Guayaquil fue denunciado por la asambleísta Lucía Jaramillo luego de que Alvarez publicará comentarios en referencia a ella en su cuenta de la red social X. La asambleísta Lucía Jaramillo denunció a Alvarez luego de que, el 16 de julio de 2024, el actual Alcalde de Guayaquil posteaba que es una «niña vaga» y una «vocera turra». Estas palabras se consideraron como estereotipadas y despectivas. Así lo determinó el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) y reafirmó que se constituyen en violencia política de género, pues menoscaban la imagen pública de Jaramillo.
Además, se consideró que las palabras de Alvarez atentan contra su dignidad en el ejercicio de su cargo como asambleísta y se declaró responsable al denunciado. Por ello, el TCE sentenció a Aquiles Alvarez con las siguientes sanciones:
Se impuso una multa de 21 salarios básicos, que corresponden a 9660 dólares, y se debe pagar en un plazo máximo de seis meses. Como medidas de reparación, se prohibió cualquier comunicación que haga referencia a la denunciante y la eliminación del post en al red social X. Además, el sentenciado debe publicar las disculpas públicas en su cuenta de X dentro de 10 días y dejarla por 30 días. Debe cumplir un curso de sensibilización contra la violencia de género de 20 horas en un plazo máximo de 60 días.
Reacciones ante la sentencia de la asambleísta Lucía Jaramillo comentó en su cuenta de X que la sentencia «deja un precedente contra quienes piensan que el poder se impone con intimidación». Se mostró agradecida con su equipo legal. Añadió que «esta es una victoria para todas: Aquí no nos calla nadie!». Por su parte, Aquiles Alvarez señaló: «Jamás pedir disculpas por decir la verdad, la vagancia no tiene que ver con género». Agregó que un informe de Contraloría sustenta que la asambleísta no acudía a trabajar.
Se mostró enfático en el rechazo a ofrecer disculpas y que prefiere la destitución. También hizo referencia a su labor en la Alcaldía: «Señores del TCE: prefiero que me destituyan, vengan a hacerse cargo de un Guayaquil que quedó destrozado… Vengan no más, destitúyanme si quieren». «Vengan nomás, atropellen la democracia y destituyan a un alcalde que recorrió toda la ciudad de forma honrada, para buscar una opción de cambio y que hoy la lucha día a día por sacarla adelante».
«Destitúyanme, los espero. Veamos que reacción de la mayoría gente en las calles y zonas que estuvieron olvidadas de Guayaquil, que hoy en esta administración POR FIN tienen agua potable después de 40 años cuando lo hagan (sic)», concluyó.
Fuente: Ecuavisa